marzo 18, 2005
Día de lluvia intensa, Viernes, 18 de Marzo de 2005
Ayer decidimos que cuatro de nosotros iríamos a visitar las comunidades de garifonas locales distribuidas en varios de los pequeños cayos, al objeto de documentar su estilo de vida tradicional y de explotación sostenible de las aguas que rodean sus pequeñas aldeas.
ara documentar parte de la vida diaria de la comunidad nos levantamos a las cinco de la mañana, preparamos el material para la filmación y nos vamos hacia el embarcadero cuando apenas el alba despunta. Los colores grises dejan paso a los azules, los naranjas y finalmente los amarillos anaranjados toman el cielo a pesar de las nubes. Allí nos espera de nuevo Elías Aguilar para llevarnos al Cayo Chachahuate. Desde este y los otros cayos, los niños son enviados cada día en pequeñas embarcaciones al colegio de la comunidad, situado en East End, en el Cayo Mayor. Son como autobuses escolares, pero interislas. La noche ha sido ventosa, Elías nos comunica que hay bastante mar y que por seguridad, los niños hoy no acudirán al colegio. Por lo tanto hay un cambio de planes.
El viento sigue en aumento, podemos ver incluso desde la orilla las corrientes que se van produciendo. Un pelicano pardo nos brinda la ocasión de presenciar su primera captura matutina. En un vuelo rasante, casi pegado al agua, localiza su desayuno, segundos después y con un aterrizaje poco ortodoxo, zambulle su cabeza y atrapa su pescado. Está tan cerca de nosotros que podemos ver los últimos movimientos del pez dentro de la bolsa de su pico. Sólo por asistir a este espectáculo merece la pena madrugar.
Empieza a llover, primero lentamente, pocos minutos después la lluvia es intensa. Decidimos retrasar un poco la salida, pero a pesar del mal tiempo, los buceadores realizarán las inmersiones previstas para la mañana de hoy, se dirigen hacia Cayo Gallo tras extremar las medidas de seguridad.
La inmersión se realiza a unos 16 metros, el agua esta un poco turbia debido a la tormenta, los torrentes arrastran sedimentos y queda mucha materia en suspensión, lo que hace más difícil la localización de las especies. Aún así hemos podido ver un ermitaño gigante ( Petrochirus diogenes ) que llevaba como ” casa ” una enorme concha de caracol reina ( Strombus gigas ). Era una zona de fanerógamas muy poco densa, donde dominaba el pasto de tortuga ( Thalassia testudinum ), pero con gran variedad de algas pardas y verdes, como varias Ditctyota spp., y Halimeda spp., además del alga ” chupachups “, como la ha bautizado Mar por su gracioso aspecto. Se trata del Rhipocephalus phoenix.
El tiempo mejora ligeramente, en esta ocasión se dirigen a la Punta Norte de Cayo Menor, donde entre otros hemos encontrado cirujanos azules ( Acanthurus coeruleus ) alimentándose de algas, y algunos meros, como el de Nassau ( Epinephelus striatus ) y el negro ( Mycteroperca bonaci ) entre las oquedades de este paisaje lleno de grietas y cuevas. Cuando intentábamos filmar un mero de Nassau, se nos ha cruzado un pez cerdo ( Lachnolaimus maximus ) que se escondía detrás. También hay numerosas castañuelas azules ( Chromis cyanea ) y gramas hada ( Gramma loreto ).
La zona alberga diversas gorgonias, en especial de las Plexauridas, gorgonias pluma ( Pseudoterogorgia spp. ) y látigo ( Elisella sp. ), y algunos corales lechuga ( Agaricia spp. ), estrella ( Montastraea spp. ), elípticos ( Dichocoenia spp. ), flores ( Eusmilia sp. ), así como el Meandrina meandrites. También es rica en esponjas barril ( Verongula gigantea ), bola ( Ircinia strobilina ), cuerda y tubo ( Aplysina spp. ) y vaso azules ( Callyspongia plicifera ).
En general, y como ha sido la tónica en todas las zonas de inmersión hemos encontrado coral en buen estado. Sólo algunos cuernos de alce y ciervo ( Acropora spp. ) partidos, posiblemente como efecto del huracán Mitch, unos pocos blanqueados, otros con la enfermedad de la mancha blanca y algunas gorgonias con aspergillosis Una enfermedad provocada por un hongo que las infecta y termina produciéndoles agujeros.
Por la tarde el tiempo no permite otra salida, así que aprovechamos para cargar nuestras botellas de aire comprimido, endulzar los equipos y limpiarlos a fondo, también preparamos y editamos imágenes y fotografías ya que mañana por la mañana esperamos la llegada de periodistas hondureños a documentar la expedición del Oceana Ranger.