mayo 18, 2012
Bucear o no bucear
Nada más desayunar se han lanzado las dos zodiacs. Mientras montábamos la grifería y con los trajes secos a medio poner íbamos hablando de la próxima inmersión.
Una llamada de los guardacostas de las Åland lo detuvo todo. ¿Teníamos permiso para bucear en Kalvskär? Tras unos 45 minutos de espera dentro de los trajes, las autoridades locales decidieron que no teníamos los permisos adecuados para bucear en esa zona. Se canceló la inmersión.
Cambiamos a una inmersión de ROV relativamente profunda (230 metros) muy cerca de la isla donde pretendíamos haber buceado por la mañana. De la profundidad surgieron una serie de blénidos vivíparos, isópodos y algunas gambas. El fondo no parecía anóxico, como sí ocurre en muchas de las partes más profundas del Báltico. Una muestra arrojó un lodo espeso con una consistencia como de medusa.
Tres inmersiones más de ROV y con eso ya hemos echado el día. Nos encaminamos hacia el norte del golfo de Botnia.