Report | abril 28, 2010
Redes de deriva italianas: la continuidad de una pesca ilegal
El uso de redes de deriva para la captura de grandes pelágicos es ilegal, ya que constituye una amenaza para la conservación de varias especies de cetáceos, tortugas marinas y tiburones. Las primeras medidas contra la utilización de este arte de pesca fueron adoptadas en el seno de las Naciones Unidas hace más de 15 años; sin embargo estas redes, denominadas comúnmente como “cortinas de la muerte”, continúan siendo utilizadas en varias zonas del mundo.
Oceana desarrolla una campaña contra el uso de este arte de pesca en el Mediterráneo. Por tercer año consecutivo, se han llevado a cabo observaciones sobre el terreno y alta mar con el fin de identificar y denunciar el uso de redes de deriva, actividad de pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (IUU en sus siglas en inglés) en los términos definidos por la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). El caso de la flota italiana es, dentro de este contexto, uno de los más notorios por haber sido tratado a través de diversos planes de reconversión financiados con fondos públicos, iniciados hace más de 10 años. De los resultados obtenidos y presentados en este documento se deriva que más de 137 embarcaciones italianas continúan utilizando este arte de pesca ilegal, muchas de ellas tras haber recibido cuantiosas subvenciones. La cuantía total percibida por las embarcaciones identificadas por Oceana en concepto de subvención para la reconversión asciende a más de 900.000 euros.
El presente documento pretende facilitar una visión completa del uso de redes de deriva en Italia, indagar en las causas de la persistencia de este arte ilegal, analizar posibles fallos derivados de la gestión, y proponer recomendaciones no sólo para la total eliminación del uso de este arte de pesca, sino también para contribuir en la elaboración de futuras medidas de este carácter que sean adoptadas dentro de la gestión pesquera comunitaria.
Italian driftnets: illegal fishing continues
Reti derivanti illegali italiane: la pesca illegale non si ferma