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septiembre 15, 2014

Un paso de gigante para salvar a los tiburones

Jardines de la Reina - Cuba

 

Ayer entró en vigor la incorporación de cinco nueva especies de tiburones y todas las rayas al Apéndice II de CITES (Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres), como se había acordado en la última reunión en Bangkok (Tailandia).

Las especies de tiburones que entran en la lista son el tiburón coralino o jaquetón oceánico, el cailón y tres tiburones martillo (cornuda común, cornuda cruz y cornuda gigante). Todas ellas están amenazadas según la Lista Roja de la UICN.

¿Qué significa para estos animales?

El Apéndice II de CITES contiene especies que corren riesgo de extinción si no se establecen unos límites al comercio. Esto quiere decir que se regulará estrictamente el comercio internacional de estas especies en los 180 países signatarios, limitándolo para asegurar su supervivencia en libertad.

Todo comercio deberá contar con permisos para asegurar que los animales se han capturado de manera sostenible y legal, y debe comunicarse al secretariado de CITES.

Aleta de tiburón en superficie, sur del Mar de Alborán, Marruecos. © OCEANA Carlos Minguell

Una de las mayores amenazas que sufren los tiburones en el mundo es el comercio de aletas, una demanda procedente en particular de China. En China, la sopa de aleta de tiburón es una exquisitez asociada con la buena suerte, el honor y la prosperidad y suele servirse en bodas, celebraciones de Año Nuevo y otras ocasiones.

Considerando la enorme población de China (1.400 millones de personas), es fácil ver que su afición  por la aleta es una enorme desgracia para los tiburones. Debido a la gran demanda, a veces se captura a los tiburones solo por las aletas, que se cercenan en vivo mientras el animal se devuelve al mar y muere desangrado o ahogado.

Gran parte de la demanda de rayas proviene también de China, ya que las agallas se emplean con fines médicos, aunque su utilidad no está respaldada científicamente y ni siquiera procede de la medicina tradicional.

¿Cómo se puede detener el comercio de estas especies?

Es muy cierto que detener el comercio no reglamentado de estas especies será un reto y requerirá una cooperación muy estrecha entre países, gobiernos y ONG. Sin embargo, la buena noticia es que la Unión Europea ha aportado 1,2 millones de euros para contribuir a aplicar las nuevas medidas.

Desde el plano tecnológico, se ha desarrollado una nueva aplicación llamado iSharkFin para identificar especies de tiburón por la forma de la aleta. El objetivo son inspectores, agentes de aduanas y comercializadores de pescado, y constituirá una gran ayuda para aplicar la regulación asociada con el Apéndice II de CITES.

¡Las cosas van mejorando para los tiburones! Lo primero es que entre todos los países que expresaron reservas sobre la incorporación al listado de CITES (Japón, Islandia, Canadá, Guyana y Dinamarca en nombre de Groenlandia) no estaba China. Además, las ventas de aleta de tiburón están empezando a descender en ese país.

Por fin parece que hay un compromiso real por parte de todo el mundo para proteger a estos maravillosos animales.