junio 13, 2018
Dos años de trabajo
En mi primer día a bordo de esta expedición me uno a su última semana de trabajo en las aguas profundas que rodean a las bellas islas. La última vez que estuve en Salina fue hace dos años, cuando participé en un think tank organizado por el Aeolian Islands Preservation Fund, en el que se debatió sobre las posibles maneras de crear un área marina protegida. Fue allí donde, junto a Blue Marine Foundation, comenzamos a debatir la posibilidad de realizar una expedición como esta, para ayudar a descubrir algunos de los secretos de lo que habita en las aguas profundas y sin explorar del archipiélago… Y ahora, tras meses de planificación para que esto suceda, aquí estamos: en el Ranger, sumergiendo el ROV y con ganas de ver qué es lo que aparece en las cámaras una vez que comiencen a filmar la vida en el fondo marino. Es la culminación de los esfuerzos de mucha gente y estamos haciendo todo lo posible para aprovechar al máximo esta oportunidad de conocer lo que vive bajo la superficie, en la base de estas islas volcánicas y en el lecho oceánico que hay entre ellas. Como siempre, es un privilegio formar parte de esta aventura, así como la oportunidad de contribuir a un proyecto mayor para proteger las aguas de las islas Eolias.