agosto 22, 2008
Capo de Santa María di Leuca
Zarpamos de Brindisi hacia el sur del Capo de Santa Maria di Leuca, en el Mar Jónico, zona donde han sido descritos arrecifes de coral de profundidad dominados por las especies Lophelia pertusa y Madrepora oculata. Varias campañas científicas han registrado colonias de estas especies a partir de los 110 m y hasta los 470 m de profundidad. A estas profundidades, en asociación con estos corales de profundidad, se han registrado unas 30 especies diferentes de esponjas.
Después de varios días en puerto, estábamos deseando salir a navegar y comenzar a documentar los fondos con la ayuda del Rov. La vida en el Marviva Med y la infraestructura que tenemos a bordo es muy diferente a la que teníamos en el Ranger. Hay más espacio, personal y equipos, lo que nos permitirán llegar a profundidades mayores.
Al llegar a la zona deseada, al sur del Capo, sondeamos con la idea de conocer un poco la geomorfología del fondo y las profundidades de la zona y elegir un lugar donde realizar las primeras pruebas de inmersión del Rov. A pesar de que nos enfrentamos a la utilización de un nuevo sistema de inmersión y a unas profundidades mayores, la coordinación entre los técnicos y el capitán, además de todo el resto del equipo que ayuda en tareas de apoyo con el umbilical, fue un éxito, así que tras hacer varios ajustes técnicos sumergimos el Rov nuevamente sobre fondos a 450 metros de profundidad. Sobre el sustrato, fangoso, encontramos algunos látigos, plumas de mar y peces de profundidad, pero en lugar de arrecifes de coral encontramos numerosas marcas de arrastre de diferente tamaño. Cualquiera que fuera el rumbo del transecto que hiciéramos, ahí estaban las marcas que dejan los barcos que utilizan este sistema de pesca tan destructivo.
Tras documentar los fondos al Sur del Capo de Santa Maria di Leuca durante dos días, zarpamos rumbo a las Islas Eolias, donde continuaremos con nuestro trabajo en zonas profundas.