Montaña de Seco de Palos
El Seco de Palos es un monte sumergido a 30 millas náuticas de la costa murciana, entre los 100 y 3.000 metros de profundidad. En la zona habitan temporal o permanentemente muchas especies pelágicas, como calderones, tortugas marinas, aves marinas, peces espada y peces luna.
Hasta hace unos años, apenas existía información sobre las especies y hábitats presentes en el seco, a excepción de algunos estudios sobre su geología y los conocimientos de los pescadores que acuden a él. En 2007, Oceana se convirtió en la primera organización que tomaba imágenes. Para ello empleó un ROV (Remotely Operated Vehicle), realizando nuevas expediciones en años posteriores.
Así, Oceana ha documentado comunidades de interés ecológico, muchas de ellas extremadamente frágiles ante impactos como la contaminación o algunas técnicas de pesca, como el arrastre y el palangre de fondo, que pueden ser muy agresivas sobre ciertos tipos de hábitats y especies. Destacan, entre otros, los jardines de gorgonias o los campos de corales blandos presentes en las zonas más cercanas a la cima y los campos de crinoideos en zonas batiales, más profundas.
En 2012, se obtuvieron muestras de un organismo que, tras ser analizado por el CSIC, fue identificado como una especie nueva para la ciencia: el Spiculosiphon oceana. Se trata de un foraminífero gigante que imita a una esponja carnívora, y constituye la primera especie descubierta por Oceana.
HÁBITATS Y ESPECIES
Las imágenes tomadas por Oceana muestran que el Seco de Palos tiene profusión de jardines de gorgonias. Los encontramos sobre sustrato rocoso en la cima, desde los 100 metros de profundidad y con predominio de la especie Paramuricea clavata, gorgonia roja mediterránea de gran belleza. En zonas algo más profundas y hasta -160 metros, aparece la gorgonia látigo Viminella flagellum, que, aunque con una densidad algo menor que la anterior, también forma densos jardines. A mayor profundidad también hallamos jardines dominados por las especies de profundidad Callorgorgia verticilata o Swiftia pallida, especies de menor envergadura, formadoras de hábitats muy característicos en estos fondos.
Los campos de corales blandos son zonas con elevada presencia de estos invertebrados, en este caso de las especies Alcyonium palmatum y Paralcyonium spinulosum. En el Seco de Palos forman grandes campos entre los 110 y los 150 metros de profundidad, en zonas de sustrato rocoso.
Por último, se han localizado zonas rocosas caracterizadas por presencia del crinoideo Leptometra phallangium en altas densidades. En determinados lugares del Mediterráneo esta especie actúa como hábitat esencial para especies comerciales como merluza (Merluccius merluccius), bacaladilla (Micromesistius poutassou) o faneca (Trisopterus minutus capelanus). Aquí, se ha avistado ya a profundidades mayores a los 350 metros. En este caso, a pesar de que el hábitat típico de la especie son fondos blandos, se han localizado principalmente sobre fondo rocoso.
Podemos destacar también otras especies muy presentes formadoras de comunidades de interés, como el gusano tubícola Lanice conchilega, muy presente en los fondos blandos del seco y abarcando un amplio rango de profundidad, desde las partes más someras hasta fondos que superan los -600 metros.