Nuevos estudios de Oceana y el Colegio Oficial de Biólogos de Euskadi destacan la riqueza del área marina frente a Jaizkibel

Oceana y el COBE proponen la creación de un corredor ecológico marino, que supondría un ejemplo de conservación transfronteriza

Press Release Date: octubre 13, 2010

Location: Madrid

Contact:

Marta Madina | email: mmadina@oceana.org | tel.: Marta Madina

La construcción del puerto exterior de Pasaia es incompatible con la protección de Jaizkibel, incluido en la Red Natura 2000 de la UE, según reconoce el Informe de Sostenibilidad Ambiental de la Autoridad Portuaria.

Durante las últimas semanas Oceana y el Colegio Oficial de Biólogos de Euskadi (COBE) han realizado nuevas inmersiones en el área marina frente a los acantilados de Jaizkibel, justamente donde la Autoridad Portuaria de Pasaia planea la construcción del puerto exterior. En esta zona se han podido identificar lajas  rocosas cubiertas por corales, comunidades de esponjas, importantes comunidades de algas así como una gran diversidad de especies marinas como congrios, cabrachos, anémonas joya, erizos y estrellas de mar.

Con esta información la organización internacional de conservación marina y el COBE complementan la información científica que avala la creación de un área marina protegida en la zona y que dieron a conocer en abril de 2010 en la presentación pública de su informe “Protección de la zona marina frente e Jaizkibel y Ulía, Euskadi”.

En mayo, las dos entidades comparecieron ante la Comisión de Medio Ambiente, Planificación Territorial, Agricultura y Pesca del Parlamento Vasco en Vitoria. Un mes más tarde, Oceana volvió a presentar su propuesta en la Comisión de Desarrollo del Medio Rural de las Juntas Generales de Gipuzkoa. Igualmente, durante este verano la Propuesta Oceana-COBE ha sido remitida oficialmente para su análisis y discusión a los 10 Ayuntamientos afectados y situados entre Donostia y Biarritz.

Recientemente, desoyendo las recomendaciones científicas,  las Juntas Generales instaron al Gobierno Vasco y al Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino a que excluyeran de cualquier protección los espacios destinados a la construcción tanto del puerto exterior como aquellos necesarios para la construcción de accesos y comunicaciones, en caso de que estas instituciones decidan crear áreas protegidas y LIC marinos.

El corredor ecológico propuesto por Oceana y el COBE ocuparía unas 27.000 hectáreas marinas y recorrería más de 35 kilómetros. Supondría un ejemplo de conservación transfronteriza al sumar las 13.000 hectáreas frente a los acantilados de Jaizkibel y Ulía a las zonas ya propuestas por el gobierno francés para su inclusión en la Red Natura 2000 entre Hendaia y Biarritz. Este corredor sería crucial para la protección de más de un centenar de comunidades marinas así como de cerca de un millar de especies diferentes incluidas algunas protegidas, como la marsopa, el delfín mular, la anguila, la lamprea marina, el mero, la esponja común, el bogavante, etc.

El Informe de Sostenibilidad Ambiental del Plan Director de Infraestructuras del Puerto de Pasaia será sometido próximamente a información pública,  e incluye la construcción de un puerto exterior. De acuerdo al propio informe, el impacto que produciría este proyecto en el medio ambiente sería severo y vulneraría la legislación internacional al ser incompatible con la protección efectiva del Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) de los acantilados de Jaizkibel, incluidos en la Red Natura 2000 de la Unión Europea.

“Este tipo de proyectos en zonas protegidas son inviables. Su desarrollo incumple la legislación internacional e incluso el propio informe ambiental que ha presentado la Autoridad Portuaria de Pasaia lo deja bien claro. Tanto el Gobierno Vasco como el Gobierno Central debe poner freno a este tipo de propuestas con alto impacto ambiental y enfocar sus políticas ambientales hacia el cumplimiento de la normativa y de los acuerdos internacionales”, ha declarado Ricardo Aguilar, Director de Investigación de Oceana en Europa.

Actualmente menos del 1% de la superficie marina en el Cantábrico está protegida, cifra muy por debajo del 10% que estable el Convenio de Diversidad Biológica. Además, la normativa europea obliga a todos los Estados Miembros a crear una red de áreas protegidas conocida como Natura 2000. Sin embargo, en lo que se refiere al medio marino, el Estado español está muy lejos de cumplir con  sus obligaciones, más aún en el Cantábrico, según evaluó la propia Comisión Europea en 2009. Igualmente España se comprometió a crear una red de áreas marinas protegidas antes del 2010 en la Convención para la Protección del Medio Ambiente Marino en el Atlántico Nordeste (OSPAR), fecha que se acaba de retrasar hasta 2012. Nuevamente, en relación al resto de los países del Atlántico Nordeste, España ha sido uno de los países peor evaluados ya que cuenta tan sólo con 2 áreas marinas protegidas.

“La situación en el Cantábrico es pésima.  Es una de las zonas que cuenta con menos protección y aún así, seguimos sin hacer los deberes. No cumplimos con ninguno de los acuerdos internacionales en materia ambiental, posponiendo continuamente la creación de áreas marinas protegidas para el futuro”, indica Jon Ander Etxebarria, Decano del Colegio Oficial de Biólogos de Euskadi (COBE).

“Protección de la zona marina de Jaizkibel y Ulia, Euskadi”: Enlace a Informe y Oceana TV

Más información