Los mediterráneos podrían despedirse de sus platos de pescado favoritos si los países no ponen coto a la sobrepesca
Press Release Date: julio 30, 2024
Location: Bruselas
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Emily Fairless, Communications Officer | email: efairless@oceana.org | tel.: +32 478 038 490
Francia, España e Italia deben recuperar con urgencia la merluza para revertir el casi colapso comercial y reconstruir las poblaciones de cigala
Oceana reclama medidas más contundentes para poner fin a la sobrepesca y recuperar las poblaciones de merluza europea y cigala. La organización, como reacción a un informe de la Comisión Europea, señala a Francia, Italia y España la urgencia de evitar que estos peces y otros desaparezcan de nuestras cartas en los restaurantes y les insta a seguir trabajando sobre el progreso ya alcanzado con el plan plurianual para el Mediterráneo occidental.
A pesar del progreso de los países para recuperar las poblaciones de peces, en concreto el salmonete de fango en el Golfo de León, el 57% de las poblaciones de peces del Mediterráneo occidental sufren de sobrepesca, según Oceana. Algunas poblaciones como la gamba roja, la gamba de altura y el langostino moruno se encuentran en una situación muy delicada. Si los países no ponen fin a la sobrepesca, Oceana estima que podrían alcanzarse niveles tan críticos que la pesca comercial de dichas poblaciones dejaría de tener sentido. Esto ya está ocurriendo con la merluza europea y la cigala en el Norte de España, que se encuentran tan sobreexplotadas en estas aguas que podrían pronto dejar de ser rentables.
En palabras de Javier López, director de la campaña de pesca sostenible de Oceana en Europa: “El empeño de la Comisión Europea en que los países sigan implantando el plan plurianual del Mediterráneo occidental es un rayo de esperanza para las especies sobreexplotadas en estas aguas. Francia, Italia y España deben fijar posibilidades de pesca para el año que viene a unos niveles que permitan la recuperación de estas poblaciones, lo cual incidiría positivamente en los ecosistemas marinos y el futuro de la pesca”.
A partir de 2025, se exigirá la explotación sostenible de las poblaciones pesqueras. Más concretamente, el 1 de enero es el plazo fijado en el plan para que Francia, España e Italia garanticen que las tasas de mortalidad por pesca se sitúen en rangos sostenibles, compatibles con el Rendimiento Máximo Sostenible. Para lograr este objetivo para las seis especies demersales cubiertas por el plan (que viven en el fondo marino o cerca de él), Oceana insta a los países a:
- Asignar jornadas de pesca para los barcos arrastreros acordes a los niveles recomendados por los dictámenes científicos
- Mejorar la selectividad de los aparejos de pesca para reducir las capturas de juveniles, por ejemplo de merluza europea
- Establecer periodos de veda para el arrastre de fondo con el objetivo de proteger los hábitats esenciales para las especies pesqueras –caladeros críticos para la reproducción, cría y alimentación
- Adoptar medidas correctivas para todas las poblaciones de peces que se encuentren en un estado crítico de manera que puedan volver a situarse en niveles saludables.
La Comisión debe informar ahora al Parlamento Europeo y al Consejo para evaluar la consecución de los objetivos del plan transcurridos cinco años desde su entrada en vigor. A partir de los resultados de esta comunicación, presentará una propuesta a los Estados miembros a mediados de septiembre para la fijación de las posibilidades de pesca en el Mediterráneo para el año que viene.
Más información: Rebuilding western Mediterranean fisheries: has the western Mediterranean multiannual plan delivered?
