La Comisión corrobora las denuncias realizadas por Oceana sobre el uso de redes de deriva en la UE

Oceana ha identificado y documentado durante dos años la actividad ilegal de 71 rederos de deriva italianos y 37 franceses. La Comisión Europea, en un informe recientemente presentado, reconoce la existencia de estas embarcaciones, vinculándolo a las defi

Press Release Date: agosto 22, 2013

Location: Madrid

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Marta Madina | email: mmadina@oceana.org | tel.: Marta Madina

El pasado martes la Comisión Europea presentó un informe al Parlamento y Consejo Europeos sobre el seguimiento efectuado por los Estados miembros en cuanto al cumplimiento de la Política Pesquera Comunitaria (PPC) durante el periodo 2003-2005. En el documento identifican los puntos calientes de “no-cumplimiento” de la PPC que necesitan ser implementados.

El documento admite, entre otros aspectos, la continuidad en la utilización de redes de deriva para la captura de especies altamente migratorias en países de la UE como Italia, Francia, España o Grecia. Esta práctica está prohibida desde el año 2002 para la flota comunitaria y en aguas europeas. La afirmación corrobora las denuncias que viene realizando Oceana desde el año 2005, fruto de las campañas desarrolladas en el Mediterráneo a bordo del catamarán de investigación Oceana Ranger

Oceana ha identificado, documentado y denunciado la actividad de al menos 71 rederos de deriva italianos y 37 franceses que operan en aguas del Mar Mediterráneo con total impunidad, así como las cuantiosas subvenciones que algunos de ellos recibieron antes de la prohibición para su reconversión a otros artes de pesca.

Según declaraciones de Xavier Pastor, Director Ejecutivo de Oceana para Europa “La continuidad en la flota europea del uso de redes de deriva pone en duda la efectividad de cualquier medida adoptada dentro del marco de la Política Pesquera Comunitaria”.

En el documento también se reflejan las deficiencias en el control en la trazabilidad de los productos pesqueros y su comercialización, siendo éstas más importantes cuando se trata de productos pesqueros de importación. De esta forma grandes cantidades de productos pesqueros entran en los mercados de la Unión Europea sin ninguna información sobre el origen, área o método extractivo.

Este el caso por ejemplo del pez espada capturado por Marruecos con redes de deriva en el Mar de Alborán  y Estrecho de Gibraltar. Un 95% de las capturas efectuadas por este país con redes prohibidas por distintos organismos internacionales es directamente importada al mercado europeo, en su mayoría a través de empresas españolas, al mismo tiempo que desde Europa se pagan 1.25 millones de euros anuales a Marruecos para la eliminación de este arte. Una correcta trazabilidad y etiquetado de este producto permitiría a los consumidores de la UE distinguir el pez espada capturado con unas redes que constituyen una grave amenaza para la conservación de los cetáceos. De esta forma el propio mercado podría forzar la reconversión de la flota marroquí a otros artes de pesca más sostenibles como el palangre.

En opinión de Xavier Pastor: Si las medidas de control se han mostrado ineficaces durante 5 años de prohibición para eliminar estas flota, no cabe esperar más éxito en el grado de cumplimiento de otras medidas comunitarias por parte de los  Estados miembros” concluyendo, “la mejora e implementación de las medidas de control se hace más imperativa que nunca, ya que se dispone de un amplio rango de medidas en pesca, pero no se asegura su cumplimiento”.

Oceana continuará durante 2007 dando seguimiento a la evolución de estas flotas en el Mar Mediterráneo a bordo del catamarán de investigación Oceana Ranger.

Más información sobre la actividad de las redes de deriva en el Mediterráneo obtenida durante las campañas de Oceana de 2005 y 2006, así como las recomendaciones de Oceana para la eliminación definitiva de estas flotas disponibles en:

Redes de deriva italianas 2006: El informe de OCEANA

“Thonaille”: el uso de redes de deriva por la flota francesa del Mediterráneo