El Oceana Ranger documenta hábitats críticos del Mediterráneo para reclamar su protección a la Unión Europea

Corales, gorgonias, maërl y fanerógamas marinas en la lista de propuestas para la Directiva de Hábitats.

Press Release Date: agosto 19, 2013

Location: Madrid

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Marta Madina, mmadina_@oceana.org | email: mmadina@oceana.org, mmadina_@oceana.org | tel.: Marta Madina, mmadina_@oceana.org

El catamarán de investigación de la organización internacional de conservación marina Oceana se encuentra en estos momentos navegando en el Golfo de Génova llevando a cabo  filmaciones de los ecosistemas del fondo marino. El objetivo es documentar el estado de conservación de una serie de hábitats para los que la organización reclama su inclusión en la Directiva Hábitats de la Unión Europea, que debe ser revisada en 2007.

A bordo del Oceana Ranger, un equipo de biólogos marinos, apoyados por camarógrafos y fotógrafos se encuentra buceando en zonas especialmente seleccionadas por su biodiversidad marina. En ellas, se encuentran muestras bien conservadas de los hábitats que Oceana promueve que sean conservados en todo el Mediterráneo, y en particular a través de la legislación europea.

Estos ecosistemas se ven amenazados por el uso de determinadas artes pesqueras como el arrastre de fondo. Este sistema arrasa, mediante una red dotada de pesadas piezas de metal y cadenas, todos los organismos vivos de la zona por la que es remolcada. Así son capturados peces de cualquier tamaño y especie, pero también son afectados los invertebrados tales como crustáceos, moluscos, corales, gorgonias, e incluso algas y las plantas fanerógamas marinas. Todo el ecosistema queda destruido tras el paso de una red de arrastre.

Algunos de estos hábitats ya se han visto reducidos entre un 50% y 80% y su recuperación es muy difícil o prácticamente imposible ya que algunos tardan siglos o incluso milenios en formarse. De ahí la importancia de su protección inmediata, lo que también puede evitar la desaparición de algunas especies en grave peligro de extinción en este mar, como el falso coral negro (Gerardia savaglia).

Uno de los lugares que actualmente está a salvo de este arte de pesca es la Reserva Marina de Portofino, en Italia, de 372 hectáreas sumergidas. Allí, Oceana esta colaborando con la Fondazione Ermenegildo Zegna, la Universidad de Padua y el ICRAM (Instituto Central para la Investigación Marina Científica y Tecnológica) aplicada para llevar a cabo distintos programas de estudio y documentación gráfica de las especies que se encuentran preservadas en la misma. Los corales de la reserva, a pesar de estar relativamente a salvo de la actividad pesquera, se han visto sin embargo, afectados por otro fenómeno causado indirectamente por el hombre. El cambio climático ha provocado episodios de blanqueamiento y muerte de muchos de ellos en los últimos años debido al aumento de la temperatura del Mediterráneo en determinados momentos.

“La biodiversidad marina europea debe ser objeto de protección a través de la revisión de la Directiva de Hábitats de la Unión Europea, y de la inclusión en la misma de todas las especies de corales y gorgonias, fanerógamas marinas y fondos maërl”, ha declarado el oceanógrafo Xavier Pastor, coordinador de la campaña del Ranger y Director de Oceana para Europa.

Según la organización conservacionista,  esta protección  permitiría a medio plazo la recuperación de las amplias zonas del Mediterráneo que actualmente se encuentran degradadas. Ello contribuiría a la mejora de la situación de unos recursos pesqueros actualmente esquilmados y que, tras la implantación de medidas de conservación,  podrían volver a ser objeto de una explotación sostenible por métodos selectivos utilizados por flotas artesanales locales.

El gobierno español ha tomado, en este caso, el liderazgo europeo en la protección de esos ecosistemas en el Mediterráneo, prohibiendo el uso de artes de arrastre, de cerco y dragas en todas las aguas bajo control español en donde exista cualquiera de esos hábitats, así como en los fondos superiores a 1000 metros de profundidad.

“Si un país de gran tradición pesquera como es España toma la iniciativa de proteger los corales, las plantas superiores marinas y los fondos de algas calcáreas, es una clara indicación para el resto de la Unión Europea de que esas medidas son necesarias y positivas para la recuperación de las pesquerías”, ha argumentado Xavier Pastor.