Oceana en OSPAR

El Atlántico Nordeste se enfrenta a numerosas amenazas. Oceana aporta sus conocimientos y datos reunidos en las expediciones para impulsar mejores políticas de conservación en esta importante región marina.

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Overview

OSPAR es un convenio internacional que reúne a 15 gobiernos y a la UE para cooperar en la protección del medio marino del Atlántico Nordeste, en una vasta área de unos 13,5 millones de km2. Desde 2009, Oceana es observador oficial de OSPAR, contribuyendo activamente a su trabajo y al desarrollo de políticas, sobre todo respecto a áreas marinas protegidas, protección de especies y hábitats amenazados y cooperación regional dentro de la Directiva Marco sobre la Estrategia Marina.

 

OSPAR es un convenio internacional que reúne a 15 gobiernos y a la UE para cooperar en la protección del medio marino del Atlántico Nordeste, en una vasta área de unos 13,5 millones de km2. Desde 2009, Oceana es observador oficial de OSPAR, contribuyendo activamente a su trabajo y al desarrollo de políticas, sobre todo respecto a áreas marinas protegidas, protección de especies y hábitats amenazados y cooperación regional dentro de la Directiva Marco sobre la Estrategia Marina.

© OSPAREl Atlántico Nordeste se caracteriza por la variedad de características topográficas, desde cuencas oceánicas de unos 5.000 metros de profundidad en la dorsal Mesoatlántica a aguas de menos de 200 metros de profundidad en la plataforma continental que recorre el litoral europeo. En algunos lugares, hay montañas submarinas independientes o formando cadenas a lo largo del lecho marino. La productividad primaria en aguas abiertas es baja, pero aumenta de sur a norte y hacia las costas, manteniendo una rica e importante biodiversidad marina.

 

 

 

Muchos de los Estados costeros que rodean el Atlántico Nordeste se hallan densamente poblados y la biodiversidad marina de la zona está muy amenazada por dos tipos de actividades humanas: la pesca y la contaminación. Las actividades pesqueras son probablemente las que ejercen mayor presión, en concreto a través de la sobrepesca, las capturas accidentales y el impacto directo sobre el fondo marino. La combinación de actividad industrial y agricultura intensiva provocan vertidos generalizados de contaminantes (incluyendo sustancias nocivas) y de nutrientes a través de la atmósfera y los ríos. Otros impactos provienen de la exploración marina de petróleo y gas, el transporte marítimo, el tendido de tuberías o cables, la extracción de arena y grava y el vertido de material dragado.

Red de Áreas Marinas Protegidas

Los ministros de los gobiernos de OSPAR se han comprometido colectivamente a establecer una red de Áreas Marinas Protegidas (AMP) bien gestionada y coherente en el Atlántico Nordeste, un esfuerzo destinado a cumplir con las obligaciones que requiere la política ambiental y marina europea y los compromisos internacionales adquiridos con el Convenio de Diversidad Biológica. OSPAR se sitúa en primera línea del desarrollo de AMP como la primera región en designar AMP en alta mar dentro de un innovador marco legal. Oceana presta todo su apoyo a estos esfuerzos para mejorar la coherencia de la red de AMP de OSPAR, así como a la extensión de la red para englobar más zonas en mar abierto y a gran profundidad que alberguen ecosistemas marinos vulnerables.

Pese al progreso en la declaración de AMP, todavía hay importantes vacíos en la red. La representación de ciertos elementos –como hábitats bentónicos y especies como los tiburones de profundidad– es todavía escasa o inexistente en la red de AMP de OSPAR. Muchas de las zonas carecen también de una adecuada gestión de las actividades humanas, especialmente restricciones pesqueras, las actividades que representan la mayor presión sobre muchas especies y hábitats en declive en la zona OSPAR. Hasta que se establezcan y apliquen planes de gestión, no se alcanzarán todos los beneficios que aporta la gestión ni dentro de estas áreas ni más allá de sus límites, en el medio marino en general. Oceana trabaja para mejorar la gestión de las AMP y acabar con los “parques de papel” en la zona OSPAR.

 

Especies y hábitats marinos amenazados

Oceana emplea la información reunida durante sus expediciones sobre hábitats marinos amenazados que OSPAR debería proteger, como el Banco de Gorringe en Portugal o las Islas Canarias en España. Las montañas y cañones submarinos son importantes ecosistemas de profundidad y puntos calientes de biodiversidad donde se concentran para alimentarse, descansar o reproducirse numerosas especies de peces, moluscos y mamíferos marinos. Los arrecifes de corales de aguas frías están presentes a lo largo del litoral de toda la zona.

Utilizamos también hallazgos y datos propios para mejorar la clasificación e inclusión de hábitats en el sistema de OSPAR, contribuyendo así a que los representantes políticos adopten decisiones mejor fundamentadas. Sin embargo, son necesarios mayores esfuerzos para actualizar y ampliar la Lista de OSPAR de Especies y hábitats amenazados y/o en peligro, ya que ni está actualizada con los últimos conocimientos científicos ni incluye algunas especies clave amenazadas en el Atlántico Nordeste, como determinados tiburones y rayas muy amenazados. Oceana ha propuesto la adición de dos importantes hábitats a la lista de OSPAR: bosques de quelpos y comunidades de Haploops, ambos creadores de hábitats complejos que albergan muchas otras especies.

Finalmente y para la protección y gestión de estos hábitats y especies, Oceana reclama políticas que cubran sus necesidades ecológicas y aporten beneficios de conservación reales. Por ejemplo, basándonos en nuestra amplia experiencia en ecosistemas de profundidad, Oceana esbozó una recomendación para proteger las montañas submarinas del Atlántico Nordeste, que fue adoptada por las Partes Contratantes de OSPAR y se tradujo en medidas de conservación para las aproximadamente 400 montañas submarinas presentes en el Atlántico Nordeste.

Oceana agradece el apoyo del Programa LIFE de la UE

Expediciones para avalar las propuestas de Oceana
Oceana desarrolla expediciones en el Atlántico Nordeste para explorar, reunir datos biológicos y documentar zonas de interés ecológico que avalen sus propuestas de Áreas Marinas Protegidas. Para examinar las zonas más profundas se emplea un robot submarino (Remotely Operated Vehicle, ROV), mientras que un equipo de buceadores, fotógrafos y videógrafos submarinos trabajan para grabar y documentar las zonas más someras.
Luchando para mejorar el trabajo de OSPAR
Oceana participa activamente en las reuniones de OSPAR sobre áreas marinas protegidas y especies y hábitats amenazados, aportando tanto la experiencia técnica derivada de la adquisición de datos en el mar como visión y conocimientos políticos, para impulsar así la adopción y aplicación de recomendaciones ambiciosas y efectivas por parte de OSPAR.