Redes de deriva: Visión general
Las redes de deriva son un tipo de arte de pesca utilizado para capturar distintas especies pelágicas. Durante los años 80 y principios de los 90, el uso de este tipo de red se hizo muy popular debido a su mayor eficiencia y a la poca especialización necesaria para su utilización al ser un arte de pesca pasivo. Sin embargo, las redes de deriva provocan la captura accidental de miles y miles de cetáceos y otras especies en peligro de extinción.
Estas redes pueden alcanzar una altura de 35 metros y una longitud de hasta 20 km. En Italia existen dos tipos de redes de deriva: la spadara, utilizada para capturar pez espada, y la ferrettara, utilizada para capturar melvas y bonito. En Francia se conoce a las redes de deriva como thonailles y alcanzan entre los 2,5 y 10,5 kms de longitud.
Han pasado más de 15 años desde que la Asamblea General de Naciones Unidas estableció una moratoria internacional que prohibía el uso de estas redes, y siete desde su prohibición en la Unión Europea. Según la información que dispone Oceana, en España las redes de deriva han sido sustituidas por otros artes, pero cientos de barcos italianos y marroquíes utilizan aún las tristemente conocidas como “cortinas de la muerte” mientras reciben subvenciones por parte de las instituciones europeas para su reconversión.