Durante diez días, Oceana ha realizado 56 inmersiones con ROV en el Fort d’en Moreu y fondos aledaños, en las montañas del canal de Mallorca y en otras zonas al oeste de Formentera y los alrededores de la isla de Sa Dragonera.
Durante diez días, Oceana ha realizado 56 inmersiones con ROV en el Fort d’en Moreu y fondos aledaños, en las montañas del canal de Mallorca y en otras zonas al oeste de Formentera y los alrededores de la isla de Sa Dragonera.
El pasado lunes iniciamos en el puerto de Palma una expedición de diez días de duración a distintos puntos del mar Balear, con el objetivo de documentar gráficamente y tomar muestras biológicas de las zonas que deben ser protegidas a corto plazo.
Hace unos días, Oceana y Corriere della Sera se embarcaron en una misión de incógnito para detectar pesca ilegal en el puerto de Bagnara, en el suroeste de Italia. En plena noche, el equipo documentó la entrada en el puerto de pez espada capturado ilegalmente con redes de deriva. No es la primera vez que hacemos algo así: este mismo verano sacamos a la luz redes de deriva en Marruecos. A continuación os contamos más.
Hace unos días, en la localidad costera de Cascais, en Portugal, la reunión de 2014 del Convenio de OSPAR se cerró con la decisión de proteger 11 especies (incluyendo la anguila, el bacalao, dos rayas y varios tiburones) y 5 hábitats marinos vulnerables, como montañas submarinas, praderas submarinas y chimeneas hidrotermales.
Hace unos días, la capacidad de la manta cornuda de alcanzar profundidades hasta ahora desconocidas sacudió Internet, la excusa perfecta para presentar esta especie a nuestros lectores.
A pesar de su nombre, es una criatura solitaria (aunque se puede encontrar en grupos), inofensiva para los humanos y que se alimenta de plancton y pequeños peces. Puede alcanzar hasta 4 metros y pesar hasta 350 kilos.